Bajo el lema “Espiritualidad de Encarnación en el consiliario y sacerdote rural”, se dieron cita en Madrid alrededor de 28 consiliarios del Movimiento Rural Cristiano de Acción Católica . En tiempos de bajada de tensión pastoral, ha sido una gracia de Dios y un esfuerzo de los ejemplares curas de pueblo, encontrarse para reflexionar y convivir dos días, 17 y 18 de Noviembre.
Con seriedad y entusiasmo buscamos profundizar en la espiritualidad de Encarnación, desde la realidad rural que nos movemos y las exigencias que nos plantea el desmantelamiento del mundo rural, que hoy padecemos, José Moreno Losada, consiliario nacional de la JEC nos ayudó en redescubrir los elementos de la cultura actual y nuestra misión de sacerdotes rurales, gozosa y entregada en esa realidad pobre. El trabajo de los grupos trató de analizar dónde estamos y si merece la pena, hoy día, ser cura de pueblo y consiliario de los movimientos rurales (jóvenes y adultos).
Si en estos momentos, el mundo rural padece tantas carencias, nuestra respuesta de encarnación, al estilo de Jesús, nos invita a estar y trabajar en él. “Estamos donde tiene que estar la Iglesia: en el lugar de los pobres”, y no solo por estrategia, como respuesta eficaz a la secularización reinante, sino sobre todo llevados por el Espíritu de Jesús.
Por la noche, el encuentro con Juan Rubio, director de Vida Nueva, nos acercó, en coloquio sustanciosos y animado, a la realidad de la Iglesia con sus luces y sombras, pero siempre con esperanza.
El encuentro terminó con la reflexión de “Los cambios del mundo rural como desafío a la presencia de la Iglesia”. Pedro José Gómez, profesor de economía mundial en la Complutense y laico comprometido, nos metió de lleno en los cambios que se están produciendo en el mundo rural y la respuesta, que en una pastoral rural misionera, estamos intuyendo y que de hecho los Movimientos Rurales de A.C. están tratando de dar para ser fieles a lo que los pueblos y la Iglesia nos piden.
Llegamos a algunas conclusiones para la vida y trabajo pastoral de los sacerdotes y consiliarios rurales, sobre todo en la concreción del tipo de mundo rural que nos está tocando vivir y por donde descubrimos que la Iglesia, en esa realidad de misión, tiene que ir dando respuesta.
Un magnifico encuentro para conocernos y querernos. Salimos fortalecidos para esta misión fenomenal que tenemos. Se confirmó nuestra motivación: merece la pena, hoy día, ser cura de pueblo rural y consiliario en el crecimiento evangelizador de los laicos en los pueblos.
Enrique Gómez Rodríguez. Consiliario Nacional del MRC.
Con seriedad y entusiasmo buscamos profundizar en la espiritualidad de Encarnación, desde la realidad rural que nos movemos y las exigencias que nos plantea el desmantelamiento del mundo rural, que hoy padecemos, José Moreno Losada, consiliario nacional de la JEC nos ayudó en redescubrir los elementos de la cultura actual y nuestra misión de sacerdotes rurales, gozosa y entregada en esa realidad pobre. El trabajo de los grupos trató de analizar dónde estamos y si merece la pena, hoy día, ser cura de pueblo y consiliario de los movimientos rurales (jóvenes y adultos).
Si en estos momentos, el mundo rural padece tantas carencias, nuestra respuesta de encarnación, al estilo de Jesús, nos invita a estar y trabajar en él. “Estamos donde tiene que estar la Iglesia: en el lugar de los pobres”, y no solo por estrategia, como respuesta eficaz a la secularización reinante, sino sobre todo llevados por el Espíritu de Jesús.
Por la noche, el encuentro con Juan Rubio, director de Vida Nueva, nos acercó, en coloquio sustanciosos y animado, a la realidad de la Iglesia con sus luces y sombras, pero siempre con esperanza.
El encuentro terminó con la reflexión de “Los cambios del mundo rural como desafío a la presencia de la Iglesia”. Pedro José Gómez, profesor de economía mundial en la Complutense y laico comprometido, nos metió de lleno en los cambios que se están produciendo en el mundo rural y la respuesta, que en una pastoral rural misionera, estamos intuyendo y que de hecho los Movimientos Rurales de A.C. están tratando de dar para ser fieles a lo que los pueblos y la Iglesia nos piden.
Llegamos a algunas conclusiones para la vida y trabajo pastoral de los sacerdotes y consiliarios rurales, sobre todo en la concreción del tipo de mundo rural que nos está tocando vivir y por donde descubrimos que la Iglesia, en esa realidad de misión, tiene que ir dando respuesta.
Un magnifico encuentro para conocernos y querernos. Salimos fortalecidos para esta misión fenomenal que tenemos. Se confirmó nuestra motivación: merece la pena, hoy día, ser cura de pueblo rural y consiliario en el crecimiento evangelizador de los laicos en los pueblos.
Enrique Gómez Rodríguez. Consiliario Nacional del MRC.
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